MANEJE LA PALABRA DE DIOS CORRECTAMENTE
Por razones de espacio presentare dos personajes que apreciaron la Biblia como La Palabra de Dios: Isaac Newton y Abraham Lincoln.
Muchas personas al igual que estos personajes aprecian la Biblia, tanto que han dado declaraciones juradas colocando la mano derecha sobre ella. Sin embargo, ninguna se ha capacitado para hacer discípulos de Jesucristo (Mateo 28:19,20). Otros han obtenido un conocimiento como parte de su formación académica o intelectual convirtiéndose en falsos maestros (2 Pedro 2: l, 2). Algunos la han considerado como palabra del hombre, y hasta han llegado a negar la existencia del Hijo de Dios, Jesús.
Aprovechándose de la ignorancia supina de la gente, la mayoría de los lideres carismáticos, han utilizado información bíblica contaminándola con retórica fachendosa, quizás ignorando que Jehová Dios detesta el vanagloriarse y jamás los inscribirá en el Libro de su memoria (Éxodo 32:32; Malaquías 3:16; Filipenses 4:3; Revelación 20:15); pero quienes han aprendido a reconocer la voz de su Caudillo, el Pastor Excelente, Jesucristo. (Juan 10:2-16).
Los cristianos debemos manejar la Palabra de Dios correctamente para hacer discípulos, aumentar los bienes de nuestro Señor y repeler las tentaciones de Satanás el Diablo (Mateo 4:1-11).
Jesús es la piedra fundamental del templo espiritual donde mora Jehová Dios y es un ejemplo da hacer discípulos como piedras vivas para edificarlo, conservarlo y mantenerlo. Comenzó hacer discípulos aplicando las Escrituras Hebreas en el Valle superior del Jordán (Juan 1:35-51) hasta su partida hacia el Santísimo desde el Monte de los Olivos cerca de Betania (Lucas 24:44-53; Hechos 1:1-12), a menudo mientras manejaba la Palabra decía: "Esta escrito" (Lucas 7:27; 19:46; Juan 2:17).
Se requiere tiempo y esfuerzo para ser cristiano y manejar La Palabra de Dios correctamente "la espada del espíritu" (Efesios 6:17). Además reconocer al esclavo fiel y discreto hoy, recibir la ayuda del espíritu de Jehová y estar en su organización.
Jesús fue el mayordomo que alimentó a sus discípulos (Mateo 24:3; 45-51; Lucas 12:42-48), y ellos lo reconocieron como tal (Mateo 10:24,25; 18; 21; 24:42; Juan 13:6,13; 13:13). Actualmente esa mayordomía queda en manos de un resto de "0vejas" escogidas por Jehová Dios (Isaías 43:10). El espíritu santo ayuda sobremanera para entender la Palabra de Dios y manejarla con destreza. (2 Timoteo 2:15). Mediante su organización se recibe educación bíblica permanente y nos fortalece la fe con la esperanza de acompañar a nuestro Señor Jesucristo hasta la eternidad y disfrutar de las bendiciones de su Reino Celestial.
Gente de Caricuao (Sector UD2): Eduardo Leal Vaillant