martes, 29 de noviembre de 2005

El Gran Mariscal de Ayacucho, Antonio José de Sucre y el Libre Comercio

Por estar en boga el Libre Comercio, específicamente el ALCA, he querido traer a ustedes el pensamiento que tenía Sucre sobre este tema
Sucre, fuera de la presidencia de Bolivia, en su hogar en Quito, el 28 de noviembre de 1828 piensa como un economista, y en correspondencia que le escribe al Libertador le dice:
“Será inútil hablar aquí de los arreglos de Hacienda U. sabe que las bellas teorías nos han perdido, y todo Colombia está persuadida de esta verdad por lo que ha sucedido en Venezuela. Indicaré toda vez, que si no se prohíbe absolutamente en todo el Sur la introducción de artículos manufacturados ordinarios de lana y algodón hasta la harina de trigo, estas provincias se arruinaran.”

Y el 12 de julio de 1829, le escribe a su amigo Daniel Florencio O’Leary:
“Si sigue aumentando las alcabalas (los impuestos) a las telas que se fabrican en Bolivia incitará el contrabando.”

Luego le añadió:

“Una cosa es modificar los impuestos gravosos y las leyes coloniales y otra es la de dar protección a las introducciones (importaciones) extranjeras contra los intereses del país. Yo querría señor don Daniel, ser economista para decir a U. todo esto muy lindamente; pero la hago como chacarero que soy ahora y amigo del gobierno para que no se engañen con teorías, que al fin causarán una guerra civil; y digo chacarero para que no crean que hablo por interés propio, pues no tengo ni hay en casa el menor establecimiento de paños ni de ninguna otra manufactura de las que deben prohibirse.”
[1]

Como hemos visto en párrafos de las cartas del 28 de noviembre de 1828 y en la del 12 de julio de 1829, Sucre estaba contra la teoría del Libre Comercio, se oponía a ella, era proteccionista, pensaba que se debía proteger a todas las industrias de Sur de América, cerrando totalmente las importaciones textiles de lana y algodón, como también las importaciones de harina de trigo, porque de lo contrario sería la ruina para las provincias de esa región.
[2]

Apunta el historiador Jorge Núñez en su Historia del Ecuador del siglo XIX
[3] que “Bolívar se había esforzado en moralizar la administración pública y reorientar la política fiscal. Convencido cada vez más por los fraudes que cometían varios comerciantes, decretó la reorganización de las aduanas de la república, con el fin de aumentar los ingresos fiscales; por este mismo decreto estableció una revisión anual de los aranceles que permitiera reajustarlos prontamente. Para el arranque del nuevo sistema, acrecentó el arancel de importaciones y, adicionalmente fijo un “derecho de entrada” para ciertas mercancías de lujo o que competían con la industria nacional (telas y tejidos, sombreros, aceites jabones, manufacturas de cuero, muebles, aguardiente y licores, carnes saladas, y ahumadas, pescado seco, harina, sal, pólvora, cebo, etc.) y un impuesto adicional del 5% para la mercancía transportada en barcos extranjeros. Cosa interesante el nuevo arancel liberó de todo derecho a la importación de instrumentos científicos, material didáctico, instrumentos para mejorar la agricultura, la navegación o las manufacturas domésticas de lana o de algodón, plantas y semillas, mapas, libros, e imprentas. En cuanto a los derechos de exportación se fijó en 10% para toda materia prima, excepto café, quina, algodón, arroz, maíz, y menestras;[4] en un obvio estimulo a la industria y artesanía nacional se liberó de derechos a la exportación de cualquier producto manufacturado en el país”.

Fue aquí cuando intervino el Mariscal Antonio José de Sucre, quien era partidario de una política proteccionista más fuerte, el cierre total de las importaciones debido a la crítica situación económica que atravesaba el departamento del Ecuador.
Gil Ricardo Salamé Ruiz
[1] Archivo de Sucre, obr.cit. Tomo XIV Págs. 221 a 222
[2] Archivo de Sucre, obr cit. Tomo XIV Pág., 157
[3] Historia del Ecuador del Siglo XIX, Jorge Núñez. Documento encontrado en página web en el buscador Google.
[4] Ración de legumbres secas, guisadas o cocidas que se le suministran a las tropas.

Como una ranchera

(Artículo originalmente publicado en Todosadentro, sábado 26 de noviembre de 2005)
El presidente Chávez dice que en la integración latinoamericana, se ha de hablar de un antes y un después de Mar del Plata. Yo digo que cuando se escriba de la política internacional de la V República habrá que hablar de un antes y un después del episodio del sábado, cuando el Presidente, emulando a Jorge Negrete, cantó su Serenata Tapatía.
Me desempeño en un ambiente en el que predominan los opositores y puedo asegurarles que hacía tiempo que no los veía tan desconcertados. No era para menos. Cuando Chávez apareció en aquella tarima, con aquel sombrero de charro, con aquel mariachi, frente a aquella multitud, hasta quienes lo odian –yo lo sé- secretamente lo admiraron, cosa que hasta ahora, en materia de mexicanadas, sólo lograba Juan Gabriel.
Algunos alcanzaron a articular palabra para sugerir que cantara Payaso, esa pieza que no se sabe quien interpretó mejor, si Javier Solís o Daniel Santos. Pero la fuerza de la actuación diplomático-ranchera de Chávez fue tan avasallante que ni el más mezquino pudo restarle méritos. A lo mero macho que se la devoró.
“Tengo que reconocer que dio en la diana –me dijo Juan Roberto, autodenominado escuálido-. La música mexicana nos gusta a todos. ¿Quién no ha terminado alguna vez rascado en el cumpleaños propio o ajeno, cantando Las Mañanitas?”
El desconcierto de los adversarios del Presidente es comprensible. Cuando Hugo Chávez comienza a entonar México lindo y querido, no está sólo haciendo un original esfuerzo para superar un impasse diplomático sino también está demostrando quién lleva la voz cantante en el patio latinoamericano.
La imagen del mandatario venezolano adquiere una dimensión cinematográfica: legendario y épico como Pedro Armendáriz, pero con un toque de humor y sin miedo al ridículo, como Cantinflas, Tintán o Resortes.
Es natural que estén desconcertados. Frente a semejante derroche de artes escénicas, ¿con qué puede responder la oposición? ¿Con Julio Borges entonando Cucurrucucú paloma, para justificar sus relaciones con el PAN? ¿Antonio Ledezma interpretando Ay Jalisco, no te rajes, para invocar el 350? ¿Ramos Allup explicando por qué Adelita se fue con otro? ¿Teodoro disertando sobre las dos formas latinoamericanas de entender la poética de José Alfredo Jiménez: la troglodita de las rancheras y la moderna de Maná?
Queda claro, pues, quién es -y quien va a seguir siendo- El Rey.
José Pilar Torres torrepilar@hotmail.com

lunes, 21 de noviembre de 2005

La muerte perenne de Danilo

(Artículo publicado originalmente en Todosadentro del sábado 19 de noviembre de 2005)
A un año del asesinato del fiscal Danilo Anderson, lo más triste de todo es que lo siguen matando. Lo de este hombre es una muerte continua y sin fin, una fórmula de tortura perfecta mediante la cual te eliminan físicamente y, no contentos con ello, se niegan a permitir que tu alma descanse en paz.
Un personaje de Saramago en Memorial del convento dice que “no toda muerte es igual, lo que es igual es estar muerto”. El caso de Anderson comprueba la primera premisa, pues su muerte fue horrible; morboso sería recapitular los detalles. De poder escoger, seguramente pocos elegirían morir así. Pero, en cierto modo, el caso niega la segunda parte porque Danilo no está igual que los demás muertos. Es un cadáver que continúa muriendo con cada zarpazo de la infamia.
Con el aniversario del horrendo atentado ha coincidido –es un decir, no creo que sea coincidencia- el comienzo formal del juicio de los asesinos y el escándalo por las imputaciones contra los presuntos autores intelectuales. Para mantener el patrón, tales acciones han sido combustible para mover el trapiche que, desde mucho antes de la muerte del fiscal, viene moliendo su reputación, su dignidad, su integridad.
Una maquinaria enorme, compuesta por varios de los acusados, sus abogados y operadores en el campo de la opinión pública; sectores opositores fanatizados y, sobre todo, dueños de medios de comunicación y periodistas, han consagrado sus esfuerzos a reasesinar a Anderson, a destruir de tal modo su memoria que el crimen no solamente quede impune, sino que, adicionalmente, sus autores materiales e intelectuales sean reivindicados como protagonistas de un acto justo.
Para tan macabra empresa han logrado sumar las voluntades hasta de algunos miembros de la familia Anderson, llevando así al paroxismo la insólita agonía postmortem de este hombre que, literalmente, se evaporó del mundo hace un año.
Y es obvio que lo peor está por venir. El juicio, tanto en su vertiente judicial como en la mediática, promete ser un paredón donde intentarán fusilar a Danilo día tras día, matarlo una y otra y otra vez, sin asomo de misericordia.
Por fortuna, ante cada movimiento de esa infernal maquinaria de remuerte ha surgido una respuesta de vida, la posición digna y enérgica de quienes claman por el merecido castigo a estos asesinos continuos que se niegan a dejar que el alma de Anderson descanse; estos que lo mataron hace un año y lo han seguido matando hasta el sol de hoy.
José Pilar Torres torrepilar@hotmail.com

lunes, 14 de noviembre de 2005

Los analistas tualé

(Artículo publicado originalmente en Todosadentro, sábado 12 de octubre de 2005)
Según un chiste infantil, cuando el cepillo de dientes conoció al papel de baño, le dijo: “Y yo que creía que mi oficio era el más asqueroso del mundo”. Cabe imaginar un diálogo así entre un defensor gringo de la política internacional de George W. Bush y uno de esos analistas criollos que han asumido la misma escatológica actividad en nuestros países latinoamericanos.
Y es que defender los desmanes mundiales de Bush ante el público estadounidense ha de ser como cepillarle los dientes al lobo para que luzca una linda sonrisa antes de comerse a la Caperucita. Pero defender las tropelías del gobierno de Estados Unidos ante el público latinoamericano es, sin rodeos, hacer las veces de papel tualé.
Durante la reciente Cumbre de Mar del Plata, vimos a los dos artefactos sanitarios en plena acción, tratando de limpiarle el rostro y otras partes anatómicas al jefe del imperio.
Los cepillos trataron de demostrar que Bush había logrado en Argentina, de una buena vez, conquistar la meta de impulsar el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA). Dijeron que al encabezar un bloque de 29 países, contra sólo 5 que se oponen, había alcanzado un triunfo clamoroso. Con la mayor presteza intentaron lavar la imagen del mandatario, cuya presencia en la ciudad sureña fue objeto de masivas manifestaciones de repudio.
Mientras tanto, los analistas-tualé han tenido a su cargo el trabajo más sucio. Algunos de ellos pretendieron hacer creer que la violencia que sacudió Mar del Plata y otras ciudades fue impulsada por el presidente Hugo Chávez, a pesar de que el multitudinario encuentro alternativo que encabezó el líder bolivariano fue incontestablemente pacífico.
Esta vez no pudieron decir que el presidente venezolano se había quedado solo en su clamor contra el ALCA. Los cuatro países del MERCOSUR están en sintonía con esa posición. Entonces sacaron más papel del rollo para explicar que mientras Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay se oponen por razonables causas técnicas, el impertinente de Sabaneta es el único que se opone por irracionales motivos ideológicos. Ellos, en su lógica de limpia traseros, suponen que ese argumento lo deja mal parado cuando, en realidad, es lo que más lo enaltece.
Lo último que inventaron para hacerle el favor a Mr. Dánger fue decir que después de la cumbre, Bush se fue a negociar en privado y a solas con Lula, quien, a diferencia de Chávez, es un tipo sensato. Tal parece que estos analistas, no se limitan a limpiar los regueros, sino que les gusta también comérselos.
José Pilar Torres torrepilar@hotmail.com

viernes, 11 de noviembre de 2005

CARICUAO, 31° ANIVERSARIO COMO PARROQUIA

El 11 de noviembre de 1.974 este populoso sector del suroeste caraqueño fue elevado a la categoría de parroquia.
Caricuao continúa siendo una de las parroquias con mayor número de habitantes de la capital venezolana y, además, se están haciendo las gestiones para darle, oficialmente, categoría de parroquia ecológica por contar con grandes extensiones de áreas verdes las cuales constituyen un verdadero pulmón vegetal.
Felicitaciones a todos los caricuaenses.

miércoles, 9 de noviembre de 2005


Develado un retrato del Fiscal de la Dignidad Danilo Anderson, Diga vida y no muerte, quien de morir hablo, es el titulo del acrilico sobre tela que realizo el reconocido artista plastico y premio nacional de pintura, Regulo Perez.
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martes, 8 de noviembre de 2005

Carta de Ariel

Apreciado Noel:

He conseguido tu dirección en el blog de Indio Caricuao. Debo confesar que no me gusta el estilo de tu blog demasiado sesgado para mi gusto, pero parafraseando a Voltaire: "No estoy de acuerdo contigo, pero daría mi vida por que lo dijeras".
Ahora bien, el punto de esta misiva no es la crítica hacia tu espacio. Te escribo porque me preocupa la denuncia hecha sobre las invasiones cerca de la iglesia "San Martín de Porres". Que queremos para nuestra parroquia?: Una nueva Casalta?. Comprendo y respeto las necesidades de vivienda que pudieran tener estos ciudadanos, no pudiesemos actuar de otra forma?, no podríamos colaborar en ayudarles a tramitar una vivienda o a demostrarles que estas areas verdes son parte integral de la parroquia y su invasión es una ofensa al resto de los habitantes?. Puede que mis propuestas estén teñidas de candidez, pero soy de los que creo en la negociación antes que en la imposición y creo que si no se atiende a tiempo esta situación podría crear situaciones de violencia en las cuales nadie saldrá vencedor.

Agradezco tu benevolencia con esta misiva.

lunes, 7 de noviembre de 2005

INVASIONES EN CARICUAO

La presente es para denunciarles que este fin de semana pasado amanecieron un grupo de personas invadiendo los terrenos posterior a la Iglesia en el sector UD-2, en las zonas adyacentes vía hacia la Jefatura Civil en la Parroquia Caricuao.
Solicito como habitante de la comunidad, que tomen acción a este delicado incidente porque esto es considerado violación de las leyes además de que no debemos permitirlos por el bien, la tranquilidad y armonía de la comunidad de Caricuao.
Por favor, que las autoridades competentes resuelvan de inmediato este grave problema que afecta a toda la comunidad de Caricuao.
No sé a que organismos dirigirme para seguir denunciando este problema, sin embargo, acudo a Uds. por esta vía para que por favor, sean portavoces de lo que se esta planteando y se tome acción inmediata.
Muchas gracias de antemano.
Lic. Yubira Rojas ybrojas@yahoo.com

LOS BATEQUEBRAOS

(Artículo originalmente publicado en Todosadentro, sábado 5 de noviembre de 2005)
Un lector me escribió el otro día para -entre insulto e insulto- poner en duda que hubiese venezolanos ligando contra los Medias Blancas, por estar convencidos de que Oswaldo Guillén es chavista.
Bueno, no tengo manera de demostrar lo que escuché porque no ando por ahí con un grabador ni me hago acompañar de un notario público. Pero que me crea quien quiera: los oí no una sino varias veces y mientras más se acercaba Chicago a su enorme hazaña, más bravos se ponían esos seres a los que entonces llamé –y seguiré llamado- batequebraos.
Después de que, contra todo pronóstico, Guillén se convirtiera en el primer manager latinoamericano en ganar un título de ligas mayores, el asunto de si él es amigo o no del proceso, se hizo público hasta el punto que un periódico dedicó grandes esfuerzos epistemológicos para demostrar que no, que va, Ozzie no es chavista, ¿quién dijo?
Al ser obligado a hablar del tema, el propio Guillén relató cómo recibió mensajes de quienes se declaraban decepcionados por sus supuestas preferencias políticas. O sea, que los batequebraos que yo he tenido que calarme este octubre, no deben ser los únicos que llegaron al extremo de desear el fracaso de nuestro compatriota.
Algunos opositores que inicialmente estaban con los Medias Blancas, se molestaron con Guillén porque aceptó las felicitaciones y conversó con el jefe del Estado en Aló Presidente. Y es que para la gente que sufre de globovisiones, aceptar una cortesía del comandante o ser mencionado por él bajo cualquier circunstancia, es suficiente para que a cualquiera –aunque sea un ídolo- lo claven en la cruz de los medios.
Enfermos de su rabia antichavista, los batequebraos dijeron que “¡pobrecito Guillén, ahora sí se empavó!”. Y comenzaron a hacer peso para que se cumpliera su pronóstico.
Los vi sorprendidos con la barrida en tres juegos contra los campeones de 2004, los Medias Rojas de Boston. Los observé cariacontecidos cuando los loquitos de Guillén ganaron en cinco partidos a los Angelinos de Ahaheim. Y los vi contrariados, al borde del autoenvenenamiento por mordedura de lengua, con el arrase en la llamada Serie Mundial frente a los Astros de Houston.
Por eso mi celebración es doble y hoy quiero felicitar al compatriota Oswaldo y decirle que yo, particularmente, lo respaldaría incluso si se declarase escuálido, cosa que dudo mucho porque, como dice Francisco Umbral, “el deporte es siempre metáfora de otra cosa”.
José Pilar Torres torrepilar@hotmail.com

viernes, 4 de noviembre de 2005

Venezuela territorio libre de analfabetismo

"Moral y luces son los polos de una república, moral y luces son nuestras primeras necesidades. Un pueblo ignorante es un instrumento ciego de su propia destrucción. Un hombre sin estudios es un ser incompleto"
Simón Bolívar

Durante el siglo XX la actividad científica creció en forma exponencial, nuevos inventos y nuevos descubrimientos contribuyeron para que todas las actividades humanas se sucedieran de formas muchas veces ni imaginadas, por eso hoy en día viajamos a grandes distancias en períodos de tiempos muy cortos, y eso sin considerar los viajes espaciales los cuales ya se utilizan para hacer turismo, es decir para diversión.
En la medicina se hacen experimentos para reproducir seres humanos en laboratorios, son los llamados clones los cuales, sin adentrarnos en consideraciones morales o religiosas, de alguna manera en el futuro van a contribuir a hacer mas placentera la vida del humano cuando se puedan sustituir órganos o miembros dañados o con malformaciones.
Por otra parte, la cibernética es la ciencia de mas grande crecimiento y se ha extendido por todos los rincones de la tierra y, combinada con otras ciencias como las telecomunicaciones, obtiene resultados prodigiosos y parecen extraídos de historias relatadas en libros de Julio Verne, por ejemplo: actualmente se hacen experimentos para lograr la teletrasportación de la materia, es decir, desintegrando las moléculas de un objeto, este objeto puede ser trasladado de un lugar a otro utilizando como medio de trasporte únicamente el espacio radio eléctrico.
Estas son algunas demostraciones de los miles de avances científico-técnicos logrados en el siglo recién finalizado y los cuales a su vez motorizaran nuevos inventos y descubrimientos en el futuro.
Lo anteriormente expuesto resulta maravilloso, sorprendente, bello y hasta lo consideraríamos muy normal sino fuera porque vivimos en un mundo donde las iniquidades surgen por todos lados; al margen de estos avances científicos hay millones de seres humanos impedidos de poder resolver sus necesidades básicas o de no poder acceder tan siquiera a una escuela; las estadísticas para el año 2.000 del Organismo para Ciencia y la Cultura de las Naciones Unidas, UNESCO, indican que en el mundo habían 882.000.000 de personas mayores de 15 años sin saber leer y escribir, el 20,3% de la población mundial. Cifras estas totalmente injustificadas y motivado a falta de voluntad política este problema, como muchos otros, no se ha resuelto.
Sensibilizado por las cifras mundiales y concretamente por las cifras de Venezuela, las cuales arrojaban para el año 2000 un total de 1.200.000 personas mayores de 15 años sin saber leer y escribir, el presidente Hugo Chávez Frías tomó la decisión de erradicar el analfabetismo de nuestro país y, mediante la implementación de la Misión Robinson y el método Yo sí puedo, en tan solo dos años fue alcanzado este objetivo.
El pasado 28 de octubre el presidente venezolano firmó el decreto donde declaraba al país territorio libre de analfabetismo, en acto público y avalado por la representante de la UNESCO Maria Luisa Jáuregui e invitados especiales.
Pero Chávez, en cuanto a la lucha contra el analfabetismo, es ambicioso y pretende colaborar con países que han solicitados ayuda contra este flagelo como los son República Dominicana, Panamá, Bolivia y a todos aquellos que se sumen al Alba, Alternativa Bolivariana para la América.
Es esta acción una manifestación del nuevo socialismo o el Socialismo del Siglo XXI que propugna el líder de nuestro proceso revolucionario.

Noel Martello
Caracas, 30-10-2.005.

snoels@gmail.com

jueves, 3 de noviembre de 2005

Desde la tribuna de béisbol

Parece que la manipulación de los dueños de los equipos va ha seguir arrasando con los ciudadanos y fanáticos de este deporte. “Todo por el deporte” es el slogan de los dueños de las empresas enviciadoras de producción y distribución de bebidas alcohólicas. ¿Quién se come el cuento de que es todo por el deporte? Para nadie es un misterio que estas corporaciones que manejan millardos y que pertenecen a sujetos como Gustavo Cisneros, la familia Mendoza (Polar) y otros de dudosa reputación, se monten sobre el deporte y los eventos “culturales” para invadir los espacios con basura publicitaria. Es en este hecho que descansa la tranquilidad de tener a las generaciones que están abriendo los ojos atrapadas en el consumismo frenético a que estas corporaciones apuestan para mantener este canalla modus operandi de hacer dinero y debilitar voluntades. Venezuela consume cerveza de manera desquiciada, impulsada por campañas que sin ningún tipo de regulación son desplegadas a todo lo largo y ancho de nuestra geografía. En los estadios es una aventura extrema departir con los “fanáticos” ya que se forman grupos de desadaptados que consumen estas bebidas, fuman cigarrillos irresponsablemente y envalentonados por la gregariedad atropellan a familias con niños, ofreciendo un ejemplo discordante con la alegría del evento deportivo. Las licorerías están abiertas de par en par hasta las nueve de la noche para que se abastezcan de todo tipo de brebajes para aguantar en un vehículo o en una esquina hasta altas horas de la madrugada libando y botando las botellas por allí, en nuestros espacios públicos, donde sea, ya que “haces lo que sea por una Reg....” o “la vida es una Rumba” “Únete a la Rumba IC...” , “¿Vas a arrugar?”, etc., etc., atropellando al colectivo de ciudadanos que hacen dignamente una vida respetuosa y considerada.
Nuestra convivencia ciudadana está supeditada a los dictámenes de estos mercachifles que sin ninguna imaginación se atreven a violentar la dignidad de la mujer y además idiotizan al ciudadano haciéndolo presa de una moda “cool, ice y light” que la mencionan como tendencia para que nos entre lubricada la orden de responder a un consumismo irracional de productos alcohólicos que son perjudiciales para la salud y directamente causantes de conductas inapropiadas que afectan la convivencia ciudadana.
Como siempre hago un llamado a la apertura de espacios de discusión sobre estos temas que son fundamentales para asumir derechos y deberes constitucionales, proteger nuestras instituciones y llenar de cariño nuestra convivencia.
Noviembre 2005
Gonzalo Briceño bocono@yahoo.com

martes, 1 de noviembre de 2005

DON SIMÓN RODRÍGUEZ

DON SIMÓN RODRÍGUEZ EL MAESTRO DEL LIBERTADOR
Gil Ricardo Salamé Ruiz

¡De músico poeta y loco todos tenemos un poco¡ Hoy les voy hablar del loco más inteligente que haya pisado la tierra: Don Simón Rodríguez- El Maestro de El Libertador. Era, apenas, doce año mayor que Bolívar, logró imponerse con prestigio irresistible al niño prodigio, antes díscolo y altanero, sumiso y como fascinado luego. Fue así como Bolívar, en momentos de dolores y de inspiraciones supremas, buscó en el refugio del confidente. En la hora del triunfo pidió sus brazos para ceñirse a ellos, y hasta el último día de su vida conservó como el más grande de sus cariños, como el más arraigado de sus recuerdos, el recuerdo del amor por su viejo maestro.
Nació don Simón Rodríguez en Caracas, capital de la Capitanía General de Venezuela, hacia el año 1771. Hijo legítimo de Cayetano Carreño y doña Rosalía Rodríguez, este hombre de curiosa fisonomía y de extravagantes y originales idea llevó por algún tiempo el apellido de su padre; luego por una de sus genialidades tomó el de su madre que usó hasta su muerte. Faltó en breve su padre, el señor Carreño, Simón y su hermano Cayetano, dos de los cinco hermanos quedaron bajo la tutela de un tío cura de apellido Rodríguez. Simón era irascible y dominante, no así Cayetano, un buen muchacho que solo pensaba en la música. Fue discípulo del Padre Sojo y llegó a ser uno de los grandes pianistas de su tierra. Simón y Cayetano nunca pudieron avenirse y a decir del historiador Plaza, en su obra “Ensayos sobre el arte en Venezuela” ésta fue la verdadera razón de por la cual se quitó el primer apellido. Don Simón Rodríguez, fue autodidacta, él mismo se procuró su educación y gracias a un viaje que hizo a Europa, recorriendo sus principales naciones ganó gran prestigio.
Era lector asiduo de Homero, Diderot, Montesquieu, Rousseau, Spinoza, Hobbes, y Holbach.

La máxima de Don Simón Rodríguez era:

“Educar es enseñar al hombre una industria que asegure su subsistencia y una moral que regle sus acciones con los demás”

Amaba la educación del pueblo porque le significaba la liberación.

Muerto don Juan Vicente Bolívar, la Audiencia de Santo Domingo, a petición de la señora viuda, nombró tutor del ilustre huérfano (Simón Bolívar tenía tres años) al célebre jurisconsulto Don Miguel José Sanz.
Crecido, y sobre todo, convertido en un verdadero enfant terrible, el pequeño Bolívar fue a habitar al lado de su tutor, algún tiempo después, veinte meses de vida común bastaron para que el grave doctor Sanz renunciara a la idea de poder dominarlo, y, además abrumado por sus propios quehaceres, resolvió declinar la difícil y delicada guarda. Entonces se llamó a don Simón Rodríguez. El nuevo maestro se consagró por entero a su discípulo. Día y noche cuidó de él con paternal solicitud. Más tarde cuando murió su madre. Doña Concepción Palacios y Blanco, el señor Rodríguez tuvo para su noble pupilo solicitudes de padre y madre. Con el genio suficiente para comprender, o mejor adivinar el genio colosal de su pupilo, Rodríguez se propuso a vaciar en ese surco fecundo todo el semillero liberador que gestaba en su cerebro. Las primeras lecciones que le dictaba, al pequeño niño; El Maestro del Libertador, se la hacia al aire libre para enseñarle el inmenso libro de la naturaleza. Después le enseñó las ideas revolucionarias de Juan Jacobo Rousseau. Le dio a leer a Emilio, que era algo parecido a Bolívar “rico”, “de gran familia” y “huérfano”. Para esa época don Simón Rodríguez contaba con veintiún años y Simón Bolívar tenía diez. Don Simón Rodríguez, no solo se encargó de ser un maestro de escuela para Bolívar lo hizo un gran atleta también. En sus prolongadas excursiones por el campo hizo que Bolívar desarrollara la aptitud para los ejercicios corporales, que hizo de él el caminador infatigable, el jinete maestro, el nadador intrépido, que ninguno de sus compañeros de armas pudo sobrepasar más tarde. Simoncito coronó, con trece años, “la primera” de Emilio con la conformidad perfecta según las prescripciones del educador. Las carreras por los bosques, las cabalgatas por las sabanas, las partidas en el lago de Valencia, lo habían hecho fuerte y diestro”
Pero esa educación, tan bien comenzada, iba a ser bruscamente interrumpida, a consecuencia de las ideas y procederes de Rodríguez, quien no cejaba en su empeño de formar “gente para hacer República”
Mas, como su enseñanza pareciera subversiva y peligrosa a la Autoridad española, y como, además, se viese comprometido en la revolución republicana de Gual y España y en posteriores conatos de insurrección, tuvo que emigrar. Maestro y discípulo se separaron en julio de 1797, Bolívar tenía catorce años.
Don Simón Rodríguez partiría de la Guaira, cambiándose el nombre y se hace llamar Samuel Robinson y llegando a Jamaica como tal. En una escuela en Kingston aprende inglés.
Pasó luego a los Estados Unidos y trabajó en una imprenta, ganaba solo para mantenerse; permaneció allí durante tres años, al cuarto se fue para España, llegó a Cádiz, y por Bayona se fue a la capital de Francia. Aquí conoció a un sabio alemán que residía en Viena, y se fue con él a Austria.
Mientras tanto Simón Bolívar había ido a México y a España en 1799; había gozado de las delicias de la corte de María Luisa de Parma en 1800; habían salido casi expulsados de Madrid en 1801 y contrajo matrimonio con la Marquesa del Toro en 1802; volvió a su Patria al enviudar prematuramente y retornó al Viejo Continente en 1803.
Atolondrado, y casi enloquecido por la pena llegó Bolívar a París. Y en plena Ciudad Luz, en plena capital del mundo se encontró aún más solo. Recordó entonces a su maestro, y para juntarse con él partió para Viena.
El 2 de diciembre de 1804, Napoleón se coronó Emperador de Francia en la basílica de Notre Dame. Con asistencia del Papa Pío VII. Dice el historiador Rumazo González, “fue un acto teatral entre grandioso y ridículo. El nuevo monarca se puso el mismo la corona y luego colocó la de la Emperatriz su esposa, Josefina, en doble acto de desprecio al Papa.
Robinson y Bolívar se alejaron de la multitud, Bolívar luego le comentaría a su maestro: “Sorpresa, no admiración fue el efecto que produjo en sus compañeros de armas el disfraz del Emperador”; “Se hizo emperador, y desde aquel día lo miré como tirano hipócrita”.

El juramento en Monte Sacro

El 15 de agosto de 1805, Robinson y Bolívar ascienden en paseo a una de las siete colinas de Roma, al Monte Sacro, hablan, examinan la situación de la América esclavizada; ven en lo profundo la fuerza que se requería para tal acción, Y Bolívar con lagrimas en sus ojos se volteó hacía su maestro y dijo, “Juro delante de usted por el Dios de mis padres; juro por mi honor que y juro por la patria que no daré descanso a mi brazo ni reposo a mi alma, hasta que no haya roto la cadenas que nos oprimen por voluntad del poder español”.

El arte de escribir de don Simón Rodríguez

La ortografía según El Maestro del Libertador es discurso hablado o escrito comprende dos cosas la pronunciación de las palabras y la expresión de los pensamientos, la articulación de las voces y la modulación de la voz. La escritura debe, por consiguiente, tener signos para una y otra cosa.
En cuanto a los signos que marcan la pronunciación de las palabras, la ortografía castellana necesita reformas y puede admitirlas; pero los españoles no quieren una ortografía perfecta. Alegan para ello muchas razones, pero ninguna conveniencia. Quieren por ejemplo que los signos no tengan valores determinados – quieren escribir más de lo que leen o escriben o escribir de un modo y leer de otro, o distinguir escribiendo lo que distinguen pronunciando. Limpia, fija, da esplendor, es el mote de la Academia; pero no se limpia de signos inútiles el alfabeto, y es sí como don Simón Rodríguez destierra del alfabeto toda letra como la H, que no se pronuncia, y no quieren que haya dos o más letras para un mismo sonido, como sucede con la K y la Q y la C delante de la A, O, U, debe escribirse como se habla y no complicar inútilmente el alfabeto”.
Don Simón Rodríguez adoptó un sistema similar al que se usa para escribir música, para que la gente leyese empleando distintos tonos de voz, así se valió de llaves, guiones, puntos suspensivos, tipos diversos por la forma y tamaños; de renglones seguidos o cortados.
Rodríguez escribió “la apertura de una opera no es una sinfonía de caprichos sino el preludio de toda la obra. Si es que es bien hecha, los músicos de profesión reconocen los principales rasgos de la pieza y entran en la intención del autor. Así ha de ser el prólogo de un drama, el prefacio de un libro, el proemio de un tratado, que preparan a la exposición misma”.
Es el estilo ortográfico de don Simón Rodríguez muy particular. Se empeña en llevar las palabras en un sentido más exacto. En la portada de una de sus obras se puede leer: “El conocimiento de las palabras es obligación tanto del que escribe… como del que lee.
A siglo y medio de la desaparición (28–2 –1854) de el Maestro del Libertador, don Simón Rodríguez, seguimos aguardando una reforma total de en la ortografía castellana. No obstante, siendo visionario con todo y sus 83 años, pronunció estas palabras:

“Cuando nada se espera de la vida, algo debe esperarse de la muerte”.

Don Simón Rodríguez- El Maestro del Libertador

Fecha de nacimiento: en Caracas, 28 de octubre de 1771, casi doce años mayor que Bolívar
Fecha de fallecimiento: Amotape, Perú el 28 de febrero de 1854.
1877 Cambia de nombre a Samuel Robinson.
1805 Juramento en el Monte Sacro, en Roma.
1823 Regresa a América, Cartagena, y se vuelve a llamar Simón Rodríguez.
1825.Se encuentra con Bolívar. Director General de Educación.
1826 Chuquisaca funda una escuela- taller con proyecciones en toda Bolivia. Renuncia en Chuquisaca.
1828 Publica el Pródromo de la obra Sociedades Americanas en 1828.
1830 Publica El Libertador de Medio día de América y sus compañeros de armas, defendidos por un amigo de la causa social.
1831 Año probable de su segundo matrimonio con Manuela Gómez.
1843 Paita. Visita a Manuelita Sáenz. Ese mismo año se va a Quito a enseñar en el Colegio San Vicente.
1854 Enfermó de gravedad en Cabo Blanco y muere en Amotape.
1924 Sus restos son llevados al Panteón de los Próceres de Lima.
1954 Sus restos son llevados al Panteón Nacional de Caracas, junto al sarcófago de su discípulo Simón Bolívar.
1975 La Universidad Simón Rodríguez de Caracas edita Las Obras Completas de Simón Rodríguez.